Es una pena que una desarrolladora que dió felicidad y entretenimiento en los 90s, sea hoy consumida, olvidada, resquebrajada por Microsoft, que cuya finalidad fue hacer que esta empresa se fuera al carajo en un abrir y cerrar de ojos. Donde quedó aquella maravillosa experiencia con Goldeneye, Conker, Banjo, Starfox y su gran magna obra, la trilogía DKC y otros clásicos de renombre.
Ahora nos tuvimos que tragar el inexplicable Viva Chatarra, o su insignificante aporte a Killer Instinct. Microsoft lo único que ha hecho de Rare, es sacar provecho de Kinect, dando títulos como Kinect Sports y otras marranadas que no identifican a Rare.
Lo cierto es que por fin se acordaron que Rare es de su propiedad y ahora planean proyectos para regresar a Conker y a Banjo, lo cual puede ser determinante en su futuro. Pero lo cierto también, es que los enésimos cambios en los directivos de Rare, han afectado, si fue que Rare por motivo$ quien sabe, se separó de Nintendo, es inexplicable como una desarrolladora icono se dejará llevar por Microsoft, sabiendo que no iba a lograr lo hecho con Miyamoto y compañía.
Sermón Dominical