Como se habrán dado cuenta (y para los que no) el término input lag ha cobrado importancia en el mundo de los televisores relacionado con los videojuegos, sin embargo antes de meternos de lleno al tema vale la pena explicar qué es y porque se le da cierta relevancia en los videojuegos.
Los televisores analógicos eran capaces de llevar la imagen que llegaba del receptor a la pantalla de forma inmediata, o sea, no existía ningún tipo de proceso de información en el interior del sistema. Cuando comenzó la era de la televisión digital cambio la forma de procesar las imágenes enviadas, por ejemplo, la señal de televisión normal viene en un formato compactado y debe ser descomprimida por el aparato. Tal proceso y otros más añaden un retardo a la representación de la pantalla que se conoce como input lag, dicho retardo se suele medir por milisegundos. Por dicha lógica mientras menos milisegundos tenga tu televisor supuestamente mejor experiencia de respuesta en el control obtendrás, dicho esto tendrán una idea de porque el término input lag ha cobrado peso en nuestro hobby, sin embargo, ¿qué tan importante es? ¿Es perceptible a nuestro sentido físico humano? Esto y más lo expondré desde mi punto de vista aunado a información recopilada de otras fuentes que expondré.
Existe el dicho popular que mientras menos input lag tengas, mejor experiencia tendrás con el control en el videojuego, ¿con qué se mide esto? Con milisegundos. Mientras tu televisor tenga menos milisegundos en teoría esto es mejor, sin embargo, ¿en la práctica hasta qué cantidad de milisegundos es apreciable? Antes de meternos de lleno al meollo del asunto es importante señalar que 1 segundo es el equivalente a 1,000 milisegundos: 1 s = 1000 ms = 1 segundo.
Generalmente la mayoría de televisores HD de gama media no suele sobre pasar los 50 milisegundos y los mejor calificados en Input Lag oscilan entre 24 ms a 16ms, sin embargo, teniendo como retrospectiva que para llegar a 1 segundo necesitaríamos 1,000 ms, o sea, aunque tengamos el inevitable Input Lag ¿si notaríamos las diferencias? Según yo, NO Y SÍ, y dejen me explico.
Detectar con precisión los milisegundos físicamente es imposible y mucho menos en esos rangos de 24 ms o 16 ms. No obstante si eres una persona que se la pasa comparando la respuesta del control en diferentes televisores es probable que puedas sentir ciertas diferencias, , empero, el único modo de notarlo es probándolo por ti mismo y teniendo noción de ello aunado a la sugestión, y claro, a eso le sumamos que para saberlo apreciar tendrías que estar comparando a la par de dos modelos con diferencias notables en Input Lag. En conclusión, es muy difícil que uno mismo por cuenta propia lo puedas detectar a precisión, de hecho, si no lo compararas jamás sabrías la existencia de ello e incluso dicho por especialistas técnicos con 40ms es complicado apreciar cierto lag al menos que fueras muy quisquilloso y estuvieras de en comparación con comparación en diferentes televisores con tu control.
No obstante esto no quiere decir que la calidad de Input Lag sea imaginaria, no, nada de eso. Existen rangos y físicamente los hay sin embargo su apreciación depende enteramente del factor comparativo, claro, no por ello deja de ser preferible intentar conseguir televisores con el menor input lag aunque a la larga para muchos esto podría ser una “mamada” y jamás en sus vidas lo notarían si no fuera por lo que acabo de comentar
La realidad que vemos y sentimos es sólo la que podemos percibir, lo que se nos escapa por nuestras limitaciones fisiológicas humanas no la consideramos en una realidad, ya que, no la podemos sentir ni ver. Para apoyar un poco mi hipótesis que acabo de escribir pondré esto:
El neurocientífico David Eagleman señala que estrictamente “siempre estamos viviendo en el pasado”. Nuestro cerebro tarda entre 150 milisegundos y 300 milisegundos, según Eagleman,en ensamblar una experiencia consciente después de percibir una señal. Esto ocurre porque nuestro cerebro se toma el tiempo de sincronizar todo lo que percibimos, cuando las cosas ocurren a diferentes velocidades y a diferentes distancias (por ejemplo el sonido y la luz viajan a diferente velocidad, algo que cotidianamente podemos percibir en un rayo).
Por tal lógica es imposible que podamos tener una noción exacta sobre los milisegundos cuando su rango es de 16,24, 30 o 40. Es muy difícil saber discernir entre ellos, y, en todo caso, el único modo para diferenciarlos es por medio de la comparativa inmediata de lado a lado. En conclusión: Las diferencias sí existen pero son muy relativas ya que estamos limitados a que nuestro cerebro se sincronice para estar consciente de lo que percibimos.
Será gratificante leer diversas opiniones sobre tal tema.
