Buen día damas y caballeros. Hoy les traigo otro de esos juegos de los que se habla más bien poco Headhunter
Headhunter es juego de acción con elementos de "sigilo" desarrollado por el estudio Amuze y publicado por Sega en Dreamcast y Playstation 2 que salio en 2001, en micaso lo jugue en Dreamcast.
En este juego vamos a encarnar a Jack Wade, un cazarecompensas que despierta en un laboratorio y tiene amnesia, al poco tiempo de escapar y recobrar la conciencia le encargan una misión de encontrar a un asesino, y a partir de este punto empieza la búsqueda del criminal , el descubrimiento del pasado del protagonista y una conspiración de un gran laboratorio que busca tener control total del país, maneja las leyes, trafica con órganos y además usa dispositivos para el control mental.
En lo que a nivel jugable se refiere es una mezcla de elementos de Metal Gear Solid, Driver y Resident Evil, en la que la parte de Driver sobra y es la peor ejecutada, esto desde mi punto de vista. El juego cuenta con una vista en tercera persona, los tiroteos no se caracterizaban por ser frenéticos pero eran entretenidos, existían batallas con jefes en las que se implementaban nuevas mecánicas lo que le daba variedad (lastimosamente sus jefes carecían de carisma), la parte de sigilo no era tan buena como en MGS, pero cumplía su objetivo. De este juego también tomaron esas misiones extras que ocurrían en un mundo virtual, aunque aquí son necesarias para seguir avanzado en la historia. A lo largo de la historia debemos resolver diferentes acertijos, algunos de ellos pueden recordar mucho a los de RE. Pasando al aspecto de la conducción, como lo dije arriba me recuerda al primer Driver y sobra bastante, aunque aquí vas en moto. Tu vehículo es básicamente un tanque que no sufre ningún daño sin importar la velocidad a la que choques, lo que le resta gracia, sin contar que no aprovechan este recurso sino en una misión principal, de resto solo sirve para ir entre el punto A y B.
Como ya dije, en lineas generales era una experiencia entretenida, pero nada trascendental.