El infierno de anomalías para The Elder Scrolls V parece no tener final, y es que ahora resulta que la más reciente actualización, concebida precisamente para corregir algunos de los problemas apremiantes en el juego, tuvo efectos secundarios, uno de ellos hilarante, el otro, no tanto.
Como se puede corroborar en los foros de Bethesda, ciertos dragones ahora vuelan de reversa y la resistencia de los personajes se redujo al mínimo, es decir que no importa qué pociones protectoras, armaduras o encantos estén activados, el protagonista o los NPC recibirán el efecto absoluto de cualquier ataque.
Skyrim padece de una cantidad inusitada de glitches, al grado de convertirse en un fenómeno en la red, pues la mayoría resulta absurda y risible; sin embargo, ello no justifica la enorme pifia de programación que, en su conjunto, representan para Bethesda, sin mencionar que, en algunos casos, hay un impacto real sobre la experiencia, como por ejemplo, cuando el jugador queda atascado en la geometría, se hunde en las texturas o hay un congelamiento en escenas preprogramadas porque un caballo se volvió loco y empezó a girar sobre su eje. En todos esos casos no queda más que recargar y esto implica perder valiosos minutos o hasta horas de progreso.
Es importante hacer la advertencia de que las desafortunadas consecuencias del parche 1.2 afectan a Xbox 360 y PlayStation 3 por igual. Se puede optar por no descargarlo, pero de hacerlo, sólo podrán jugar mientras se permanezca desconectado de PSN o Xbox LIVE.
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