Joseph Dumary, diseñador industrial con especialidad en tecnología y parte de la revista electrónica de artes visuales Yanko, difundió su visión particular de lo que será el futuro del Xbox, partiendo de las tendencias actuales y, por supuesto, el rol cada vez más protagónico que juega Kinect para Microsoft.
Así las cosas, su modelo, bautizado como Xbox Prestige es 100% digital y orientado por completo al control sin mandos físicos con un tamaño incluso menor al del Xbox 360 Slim. Como es de esperarse, incluye una hipotética evolución de Kinect, denominada KinectIN, la cual posee dos cámaras, cuatro sensores y micrófono de alta sensibilidad. Contempla un futuro donde los juegos se distribuyen en forma de chips reconocidos por un sensor en la consola y almacenados ya sea en el disco duro de 2 TB o directamente en la nube.
"La consola tiene un procesador de 8 núcleos para desempeño a súper alta velocidad, incluso 20 veces mayor a la de modelos previos. Soporta 3D, resolución 4K2K, DisplayPort, televisión en vivo, cámara web y GPS para conocer la localización de otros usuarios en un mapa activo, detalla Turner.
A juzgar por las mencionadas especificaciones, éste podría ser un Xbox que vaya más allá de la siguiente generación de consolas, pues en él convergen varias tecnologías emergentes o modelos de negocios aún distantes, como el de la distribución vía chip. Eso sin mencionar que el costo de un dispositivo así en estos días sería estratosférico. Por otro lado, luce relativamente similar a Slim, lo que no sería positivo para efectos de notoriedad.
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