En septiembre de 2010, Microsoft registró en la oficina de patentes de Estados Unidos los diagramas de diseño de un dispositivo portátil de proyección de imágenes en la forma de gafas con dos presentaciones: sueltas y empotradas en un casco similar al de un piloto de avión que, con una relación de aspecto 16:9 y resolución de 2560 x 2048, desplegarían video tridimensional para videojuegos y otros usos. La patente apenas salió a la luz.
Las gafas, cuyo complejo funcionamiento a partir de rayos láser viene descrito en el documento, permitirían apreciar objetos como si estuvieran a una distancia de medio metro, pero sin perder completamente la percepción de la realidad, pues serían traslucidas, abriendo así la opción de experiencias de realidad aumentada.
Como siempre en estos casos, es importante subrayar que la patente sólo certifica que se es dueño de una idea y no que ésta forzosamente se materializará, pero lo cierto es que Microsoft está trabajando en el concepto de la realidad virtual, y si consideramos una mancuerna con el sistema de registro de movimiento Kinect, las posibilidades perecen prácticamente ilimitadas.
Probablemente haya que esperar hasta la siguiente generación del Xbox para saber qué pasará con este dispositivo, pero todo indicaría que la realidad virtual podría convertirse muy pronto en parte integral de la dieta de entretenimiento, pues Sony también cuenta con su propio dispositivo de proyección de imágenes portátil y se dice que Apple y Google barajan esta misma herramienta.
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