Por segunda vez consecutiva y en el marco de una de las semanas más agitadas en la historia reciente de la NFL, se ha puesto en marcha la votación de fanáticos para elegir al jugador de portada de la próxima edición de la ya tradicional franquicia, Madden.
Se trata de 32 estrellas del deporte de las tacleadas, divididas en dos llaves de dieciséis jugadores quienes se enfrentarán uno contra uno a lo largo de cinco etapas, la primera de las cuales acaba de iniciar y concluirá el próximo miércoles 28 de marzo.
Las figuras tradicionales como Aaron Rodgers, Drew Brees y Tim Tebow están presentes, pero de acuerdo con Anthony Stevenson, cabeza de marketing para Madden, fue precisamente este último quien más sufrió en la siembra de posiciones como consecuencia de la firma de contrato de Peyton Manning con los Broncos de Denver, pues dejó de ser la sensación, para convertirse en reemplazo de Mark Sánchez en los Jets de Nueva York. Ahora, como número catorce entre los candidatos, Tebow tendrá que hacer frente a un rival más sólido: Arian Foster de los Texanos de Houston.
De haber hecho la siembra hace unas tres semanas, Tebow hubiera estado como el candidato número uno, dos o en el peor de los casos, el tres. Tuvo un gran año, guió a su equipo a los playoffs cuando esperaban estar hasta el fondo y tuvo un enorme triunfo contra los Acereros, recordó Stevenson y recalcó que, considerando la pasión de sus fans, su posición actual no jugará un rol si no logra avanzar.
Dicho lo anterior, nuestros favoritos son Calvin Johnson, quien ayudó a los Leones de Detroit a tener una de sus mejores temporadas en décadas; Victor Cruz, pieza clave en la consecución del campeonato con los Gigantes de Nueva York; y sí, por qué no, Tim Tebow, pues nadie creía en él, y armado con agallas y un poco de suerte, cambió la opinión de todo un país, al derrotar al siempre favorito Ben Roethlisberger y sus Pittsburgh Steelers.
La votación concluye el 25 de abril y recuerden también que aquél por quien voten estará expuesto a la maldición de Madden, misma que supuestamente estropea el desempeño del ganador durante la campaña subsecuente, ya sea con lesiones o derrotas.
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