La semana pasada Jason Rubin, cofundador de Naughty Dog, fue nombrado presidente general de THQ con el objetivo de contribuir al cambio de enfoque que la empresa busca implementar para sobrevivir. Como es de esperar, Rubin se dirigió a los inversionistas de THQ para hablar de sus planes: La industria está por cambiar. Si ven lo que ha pasado con el negocio de la PC, si ven lo que ha pasado en otros negocios allá afuera, verán que las distintas formas de distribuir y publicar juegos han permitido la entrada de una cantidad significativa de ingresos para otras compañías.
En un pequeño periodo las compañías pueden ir de muy chicas a enormes, Zynga es el ejemplo perfecto de ello. Creo que este negocio tiene oportunidades para hacer algo muy similar, los equipos que tenemos están bien posicionados y distribuidos para aprovechar esa oportunidad. Sabemos que una de las estrategias de THQ para salir de su problema financiero es enfocarse totalmente en sus franquicias más importantes así como crear nuevos títulos AAA para las distintas plataformas, por lo que resulta incongruente escuchar a Rubin culpar a compañías como EA y Activision por el problema de la empresa afirmando que son jugadoras importantes que tienen una gran ventaja para mantener su alto lugar.
Para concluir, Rubin dice que todo esto se trata de ver lo que THQ tiene, lo que será del negocio en un futuro cercano y hacer un ataque coordinado para entrar lo antes posible al nuevo modelo de negocios.
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