Para nadie es secreto que Xbox One no ha tenido un buen desempeño en el mercado durante esta generación y ahora que está por darse un relevo de hardware, la situación no solo no ha cambiado, sino que ha empeorado. Esto se confirmó hoy durante el reporte financiero de Microsoft, el cual expuso la difícil situación que atravesó la consola durante el último trimestre fiscal.
Hoy, Microsoft presentó el informe financiero correspondiente con el último trimestre del año fiscal 2019 y mientras sus negocios como Azure, LinkedIn y Surface registraron crecimiento, sobre todo en lo que tiene que ver con la nube, no se pudo decir lo mismo de su división de juegos. En ese sentido, la compañía reportó una caída de 10% en los ingresos del último trimestre del año fiscal, lo cual se traduce en $233 MDD menos que lo registrado en el mismo periodo, pero del año pasado. La compañía fue directa y atribuyó esta caída al pobre desempeño en ventas de Xbox One, el cual registró un descenso dramático de 48%, arrastrando financieramente a la división de juegos.
Asimismo, Microsoft informó que la venta de software dentro de la división de juegos también registró una caída de 3% en los ingresos y esto se atribuyó a una baja en las operaciones de compra generadas por un "importante título third-party", o sea Fortnite, el cual había impulsado las finanzas del software en anteriores ocasiones.
Dicho esto, la compañía reveló que el número mensual de suscriptores de Xbox LIVE aumentó 14% y durante el último trimestre del año fiscal 2019 fue posible determinar que hay 65 millones de usuarios.
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