El género de plataformas es uno de los más antiguos en los videojuegos; por décadas han sido adaptados a toda clase de temas, y recientemente es uno de los más socorridos por los desarrolladores independientes, quienes nos han entregado auténticos clásicos como Braid pero también títulos menos afortunados como Alien Spidy.

En una galaxia muy lejana en un pequeño planeta llamado Aracnia, una linda arañita sale en una misión para explorar un lejano mundo llamado Tierra. Una falla en la nave provoca que su tripulante pierda el control y el contacto con su planeta, desde donde su compañero Spidy presencia el desastre, se lanza al rescate y también sufre un accidente. Ahora Spidy está perdido en este planeta lejano recolectando —sin razón— esferas brillantes suspendidas en el aire, que ayudan a que nuestro amiguito octópodo acumule miles de puntos que no sirven para nada.

La mecánica de juego es como la de cualquier otro título de plataformas: el objetivo es llegar del punto inicial a la salida saltando entre objetos dispuestos en el nivel y evitando que el enemigo o el entorno te maten. En Alien Spidy los escenarios están construidos por elementos naturales como árboles y vegetación exótica, los enemigos son insectos y algunos alienígenas, y el entorno destructivo se compone lo mismo por objetos punzantes que flotan que por simples gotas de agua.

A lo largo de 69 niveles, el pequeño Spidy se valdrá de su agilidad, de su telaraña y de poderes especiales que encuentras en el camino, para los saltos. El diseño de niveles es variado aunque abusa de recursos como el momentum y el timing. Sin razón, el argumento pasa de una misión de rescate, una motivación clásica y universal, a la de recolección compulsiva de items, ya que el objetivo de cada nivel va más allá de simplemente atravesar sus obstáculos, además debes realizar esto en el menor tiempo posible buscando obtener la mayor cantidad de esferas azules, la combinación de ambos factores da como resultado una calificación que va de 1 a 5 estrellas que te sirven para desbloquear más niveles, una práctica que es frecuente en juegos de móviles como Angry Birds o Cut the Rope.

Alien Spidy presenta varios errores de diseño y en sus controles. Para lanzar la telaraña se utiliza el stick derecho, y dependiendo de la dirección que se le indique será a donde se lanzará, lo que suena práctico pero se vuelve una auténtica pesadilla cuando debes lanzarla en una dirección y momento precisos durante un salto o una caída, y es peor si tienes que repetir la hazaña de forma consecutiva para avanzar un pequeño tramo. Otro problema es la coherencia de algunos objetos: 2 trampolines de la misma forma y tamaño pueden lanzarte a 2 alturas completamente distintas, lo que produce una sensación desagradable. Por otro lado, los power ups y los items que te dan habilidades especiales requieren de un item adicional para ser activados, algo que suponemos tiene por objetivo extender su duración cuando se colocan más activadores, lo que se habría solucionado colocando más power ups.

El sistema de puntos y la calificación de nivel te obligan a repetir un mismo nivel varias veces, algo que supone reto y rejugabilidad, pero que ante la frustración provocada por las fallas en su diseño, se convierte en un martirio. El aspecto visual del juego y el diseño de escenarios y personajes posee calidad pero no carisma, por lo que no genera empatía con el jugador.

Alien Spidy es un título innecesariamente complicado con controles deficientes y con un argumento y diseño de arte poco atractivo, y aunque tiene cierta calidad de producción, está muy lejos de ser recomendable.