Después de 11 años de su lanzamiento original, llega el remaster de Final Fantasy XII para PS4 llamado The Zodiac Age, donde podrás revisitar o visitar por primera vez el mundo de Ivalice. Para iniciar, lo más importante es aclarar que no es sólo un remaster gráfico, sino una especie de remake miniatura que mejora las mecánicas del primer juego y les quita lo frustrante.

En esta entrega, el sistema de trabajos permite que te enfoques en diversos roles, como maquinista, mago rojo, arquero, etcétera, y podrás tener 2, lo que abre la puerta a muchas opciones como tener un arquero que cura o un mago capaz de hacer daño físico. Esto te permitirá explorar todos los roles del juego y sentirás que realmente lo completaste 100% en una sola pasada. A pesar de que este sistema es una restricción, aclara la visión del juego y hace que se sienta mucho mejor armado y con una mejor definición de objetivos.

En el primer título había un tablero de licencias enorme y era difícil planear tus movimientos para ir forjando el camino adecuado. En esta ocasión, tienes rutas mejor definidas y un tablero más chico que da más propósito a tus personajes.

Entre otros pequeños cambios que mejoran la experiencia está el hecho de que las habilidades especiales llamadas Quickenings —que son como Limit Breaks— ya no están sujetas al MP, sino a una barra que se va llenando muy al estilo de otros Final Fantasy. También puedes controlar a miembros del equipo que sólo están de paso, ver un mapa transparente en primer plano que te ayuda a no perderte en partes en las que el juego se pone laberíntico y cositas así que hacen la experiencia más agradable.

Otra de las adiciones importantes es que puedes adelantar el tiempo con L1 para aliviar lo tedioso de recorrer un mapa grande o del grinding para subir de nivel, así que puedes acelerar casi todos los procesos aburridos e ir a lo realmente divertido. Esta habilidad tiene 2 modalidades: 2x y 4x para hacer las cosas aún más rápido y que el juego se sienta más dinámico y divertido. En su tiempo, lo que distinguió a este título del resto de los Final Fantasies fue el sistema de batalla, que en lugar de ser el clásico ATB se centraba más en macros de acciones llamados Gambits. El chiste del sistema es programar tus movimientos según situaciones, por ejemplo, lanzar fuego a enemigos débiles frente a magia o curar a todo aliado cuya energía baje de 70%, lo que hace que en un punto parezca que el juego se juega solo y que provocó muchas críticas. Para algunos eso resultará aburrido, pero otros encontrarán muy satisfactorio ver que su programación funciona a la perfección.

Lo primero que notarás al poner el juego es lo bien que se ve. Square Enix hizo un magnífico trabajo en la definición de texturas; los personajes se ven nítidos y bien definidos y te costará trabajo creer que estás viendo un juego que salió en 2006. Incluso la diferencia entre el gameplay y los cinematics se nota menos que en la versión original. Sin embargo, no todo es perfecto, pues hay texturas que contrastan con la definición de los personajes en partes del medio ambiente. Por ejemplo, hay lugares donde el piso se ve muy pixelado y borroso, pero bueno, estamos hablando de un juego de 2006, y fuera de esos detallitos se ve muy bien.

El sonido es otra de las áreas en las que Square le echó muchas ganas y se agradece, pues el soundtrack está completamente remasterizado y orquestado. Puedes cambiar al soundtrack original en cualquier momento y la diferencia es tan sutil y tiene tanta calidad, que preferirás escuchar las nuevas versiones. Desafortunadamente, las voces se escuchan entubadas y apagadas, como en el original. Seguramente sólo pudieron rescatar los archivos comprimidos del juego original y tuvieron que conformarse con eso. No es algo que rompa el juego, pero es notorio. Ah, y si eres un purista, podrás escuchar el juego en su idioma original eligiendo esa opción en el menú.

Si jugaste Final Fantasy XII en su tiempo y te gustó, ésta es una compra obligada, pero si no te gustó, es momento de darle una oportunidad. Durante años, éste fue mi Final Fantasy más odiado y ahora lo disfruté bajo una nueva luz; debo decir que ya no tiene ese último lugar en mi corazón y la experiencia fue muy agradable y nostálgica. Final Fantasy XII es un juego cuya historia te tomará unas 70 horas acabar, aunque si decides cumplir todas las misiones secundarias y sus extras estaríamos hablando de algo cercano a 150 horas, así que tendrás Final Fantasy para rato.

Final Fantasy XII es un Final único que siempre se separó del resto; su remaster está muy bien hecho y sus cambios son cosméticos y funcionales, además de que el soundtrack está remasterizado y es muy bueno. Comparado con su antecesor, Zodiac Age es más dinámico y divertido porque elimina mucho del tedio del original. Visualmente, Square Enix lo hizo excelente y es un juego que, a simple vista, parece tener menos años. A pesar de todo, no deja de ser el remaster de un juego viejo y por eso le pusimos 8.7.